Noche en Júpiter con la bruja Napa

El sábado pasado fuimos al OBSERVATORI CASTELLTALLAT para hacer un «bateig del cel». La visita fue estupenda y pudimos ver diferentes cuerpos celestes. Como introducción observamos la Luna, que es fantástica, y luego más entrada la noche, nos mostraron La Galaxia Andrómeda, una Supernova y Júpiter. La visita es bastante interesante, aunque algo larga para los enanos, aún así todos aguantamos perfectamente hasta el último momento. Nasser alucinó y no quiso bajar del telescopio; la charla que dio el astrónomo, apta para todos los públicos, aunque seguramente no para todas las mentes (nos causó un cierto desasosiego), sin duda fue ilustrativa y enriquecedora. África también pudo mirar por los distintos telescopios y le gustó mucho; la Luna, para ella fue la gran protagonista.

Después de la visita dormimos en el mismo parking del observatorio; completamente solos, disfrutamos de un cielo estrellado y de una soledad regeneradora.

A la mañana siguiente nos levantamos, y descansados, cogimos la furgoneta y nos dirigimos al Prat de Lluçanès, donde teníamos entendido que, siendo tierras de brujas, había una roca la cual había sido frecuentada por la más famosas de las brujas del territorio. La bruja Napa
Dejamos la furgoneta en un pequeño altiplano, el cual se accede por una pista desde el pueblo, y caminando unos quince minutos, dimos con el recinto. Nasser, no paraba de preguntar sobre la bruja. Así que aprovechamos la información de la que disponíamos para elaborar una historieta para que los enanos se divirtieran.

Para acabar, comimos en una ermita, que se encuentra en la misma pista, y que ubicada en un pequeño promontorio, ofrece unas tranquilas vistas de la zona. Arropada por unos árboles, y con el suelo de hierba, después de comer nos tumbamos a dormir una siesta reparadora.

Volvimos a casa con la sensación de haber disfrutado muchísimo del fin de semana.